20 abril 2023
Estuve invitado a una charla sin saber que se iba a hablar de sexología, pero me encantó. De allí extraje estos párrafos:
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- Sí, a veces se confunde el amor con el sexo debido a que están estrechamente relacionados, pero también hay diferencias entre ellos. Algunas personas creen que no pueden separarse y que uno no puede existir sin el otro, mientras que otras tienen claro que amor y sexo pueden ir por caminos distintos. El amor se considera un sentimiento y una emoción social que implica no solo lujuria, sino también pasión y lazo o vínculo entre los miembros de la pareja. Por otro lado, el sexo puede ser más físico y no necesariamente implicar un componente emocional tan profundo como el amor.
- Es importante tener en cuenta que el amor y el sexo son dos conceptos distintos, aunque estén relacionados. El amor involucra una conexión emocional y afectiva profunda con otra persona, mientras que el sexo se refiere a la actividad sexual física. Sin embargo, es común que las personas confundan estos dos conceptos debido a la estrecha asociación que a menudo se hace entre ellos en la cultura y la sociedad.
- En algunas ocasiones, las personas pueden confundir la ilusión o el enamoramiento con el amor, o incluso confundir el sexo con el amor]. Esto puede ocurrir debido a que a veces se aplican términos similares para describir estas experiencias, como sentir mariposas en el estómago o tener ganas de estar constantemente con la otra persona. Sin embargo, es importante recordar que el amor implica una conexión emocional y afectiva más profunda, mientras que el sexo se refiere a la actividad sexual física.
- En resumen, aunque el amor y el sexo están estrechamente relacionados, son conceptos distintos con diferencias significativas. Es importante comprender que el amor implica una conexión emocional y afectiva profunda, mientras que el sexo se refiere a la actividad sexual física. Aunque a veces se puedan confundir, es importante tener claridad sobre las diferencias entre el amor y el sexo.
Y a veces por ir detrás del sexo se pierde el amor, un abrazo Enrique!
ResponderEliminarEs como un velo, un dulce velo, pero por su culpa, demasiadas veces, se yerra en la búsqueda del sentimiento perdurable, el amor.
EliminarUn abrazo, María Cristina.
Efectivamente.
ResponderEliminarConceptos distintos que muchas veces se confunden a la hora de hablar sobre ellos.
Saludos.
Hablar y actuar, TS, dices muy bien, son dos sentimientos muy distintos. Hay mujeres y hombres que aman a una persona y tienen sexo con otra o con varias, destapando el problema de los límites a la fidelidad cuando se trata de parejas formales.
EliminarUn abrazo, compañero.
Casi que coincido plenamente, Enrique. El sexo y el amor cada vez más no sólo no tienen mucho que ver... sino que se conectan cada vez menos... El ser humano está buscando reconfigurarse creo yo.
ResponderEliminarAbrazazo amigazo!!
El ser humano en general y el nuevo planteamiento sociopolítico al que debe enfrentarse, ya. Hay tanto por hacer, reformar, consttruir, que da miedo, querido Carlos.
EliminarUn abrazo muy fuerte.
Pienso que la sociedad vive un proceso de cambios. Muchos, donde cada vez vemos nuevas formas de amor, de expresión y de aceptación. Las parejas actuales se dan licencia para explorar más allá de lo que piensan o creen sentir. Viven el “amor” como si fuese un chicle. Lo muerden y abandonan cuando deja de tener sabor. Olvidando la esencia del sentimiento. Solo espero que como en todo, en algún momento, se den cuenta que el amor va más allá de un encuentro sexual y, que ambos conceptos pueden y deben ir juntos para un correcto desarrollo emocional.
ResponderEliminarMuy interesante estimado amigo Enrique.
Abrazos
Gracias Tatiana, me apunto esa definición que das al mundo del amor vigente: "Como un chicle, cuando se va el sabor, de desprecia y se coge otro"
EliminarFeliz viernes.
Muy interesante la disquisición.
ResponderEliminarPara un libro.
Eliminarmuy cierto cuando el amor y sexo concuerdan es genial. Porque el sexo sin amor al poco tiempo cansa. Te mando un beso.
ResponderEliminarEl asunto problemático estará en saber cuanto tiempo aguanta el amor sin sexo, amiga Judit.
EliminarUn abrazo, escritora. Voy a repetir aquí que me encantó tu post de hoy.
No cabría negar que estuviste atento a la charla... Y sacaste buen partido de la misma. :))))))
ResponderEliminarGran abrazo Enrique.
Lo aprendí en la Escuela de Aparejadores, entonces no había libros, solo apuntes.
EliminarJajajajaja, muy atento, Ernesto. Hoy se graba todo, hasta lo que no conviene, vienen con el teléfono abierto grabando y no te enteras.
Un abrazo mi observador y brillante pensador, amigo.
Si en una relación mutua funciona la simbiosis amor y sexo, la relación puede durar toda una vida, pero cuando alguna de las dos falla es, cuando se suele buscar comida de fuera, aunque muchas veces es, por falta de diálogo...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo Enrique.
Yo, Manuel, me voy a quedar con la definición de Tatiana: "Como un chicle, cuando se va el sabor, de desprecia y se coge otro".
EliminarAprendo mucho con vosotros.
Feliz viernes, Manuel.
Dos cosas distintas. Me inclino por trascender lo meramente superficial.
ResponderEliminarUn beso.
Puede, Ilduara. Se lo acabo de decir a Manuel (arriba), aprendo mucho con vosotros.
EliminarFeliz tarde y noche de viernes, a mi me queda algo más de dos horas para empezar mi viernes la nuit.
Hoy creo que hay más sexo sin amor y mucha actividad sexual física...." como si fuese un chicle. Lo muerden y abandonan cuando deja de tener sabor. Olvidando la esencia del sentimiento". Gran frase de Tatiana.
ResponderEliminarNo olvidemos que el amor implica sentimientos, emoción y afecto.
Una gran charla.
Buen viernes Enrique.
Un abrazo.
Gracias, Laura. Lo del chicle de Tatiana creo que es una comparación mucho más que aceptable, es toda una definición.
EliminarFeliz sábado.
Se puede tener sexo sin sentir amor y se puede amar sin copular. Pero, sin embargo, el mejor sexo de todos es aquel que se disfruta con aquella persona con la que compartimos un amor verdadero. Y es que, cuando hay un amor real, el sexo se convierte en una bendición, donde la lujuria deja de ser pecado y se convierte en virtud.
ResponderEliminarMientras tanto, la ilusión se parece tanto al amor que podemos confundirnos. Es como una falsa moneda que puede engañar a cualquiera que la recibe o entrega de buena voluntad.
La ilusión es un espejismo que parece ser y no lo es, es un cariño grande pero hueco, bonito, pero no valioso, dulce pero no pleno, apasionado, pero no duradero, bueno, pero no lo suficiente,
Amar se aprende amando y muchas veces hay que atravesar más de una desilusión para alcanzar ese amor de verdad.
¡Saludos!
Cuan bien los has definido, Juan Carlos, poco podría yo añadir a tu sentir y definir. Estoy totalmente de acuerdo contigo, especialmente me ha gustado ... "Amar se aprende amando y muchas veces hay que atravesar más de una desilusión para alcanzar ese amor de verdad."
EliminarFeliz sábado.
Mi muy querido Enrique!!!Primero como siempre agradecer , agradecer todo , el cariño que siento en la distancia y tus palabras y preocupacion en mis ausencias...pero tranquilo...estoy muy bien y es verdad jajajaja .. Ahora a la cuestion de la charla! Es muy cierto, te diria que adhiero bastante . Hoy se vive bastante ( y no son las nuevas generaciones solamente) , en este concepto de lo deshechable , de lo que me satisface "hoy", por lo tanto si mañana ya no tanto lo descarto. Creo que cada vez nos vamos haciendo mas incapaces de vivir "el amor", el verdadero, el que tiene todo y que por spuesto incluye el sexo!!! pero que está condimentado con un sinfín de sentimientos más profundos como la amistad, la conciliacion, la complicidad, la ternura, el respeto, la admiracion, los proyectos compartidos, la comprension, la valoracion del otro...etc...etc...solo por mencionar algunos. Que bueno sería volver a esa etapa en donde no existia el miedo al amor y al compromiso . Te dejo un abrazo grande y que tengas un hermoso fin de semana!!!!
ResponderEliminarMiedo al amor y al compromiso, que bien escribes, querida Eli. Tus textos nunca tienen desperdicio y ah, sí me has tenido preocupado, a mí y a todos los del entorno.
EliminarEres un ángel, gracias por ser así.
Un abrazo muy fuerte.
Estoy parcialmente de acuerdo con lo que se expuso en esa charla, pero con ello no quiero decir lo que yo pienso sea lo correcto. Solo es lo que yo pienso.
ResponderEliminarEn las relaciones personales (y hablo en general) no solo cuenta lo que una persona pueda despertar en nosotros. También cuentan las expectativas y las necesidades que tenemos respecto a lo que nosotros consideramos que "debe" ser una relación de un determinado tipo. Y también lo que socialmente se considera y se espera de cada tipo de relación.
Si cada ser humano actuara y respondiera respecto a su innata personalidad, y de forma espontánea, no estaría diciendo lo que digo, y las relaciones personales serían muy sanas. Pero estamos demasiado contaminados por prejuicios personas, culturales o sociales, de tal manera que podemos caer en idealizar una relación o convertirla en algo más banal. Y en otras ocasiones, se atiende más a intereses personales que a estados emocionales. Es por esto que continuamente se están rompiendo relaciones que se planteaban como "para toda la vida".
En cuanto al sexo, mi opinión es que cuando hay un amor auténtico y sólido, la conexión y compenetración emocional termina llevando al deseo de compenetrarse espiritualmente y materialmente. El sexo siempre es una necesidad instintiva, pero de nosotros depende que sea mucho más, y mucho más bello.
En mi opinión, tanto el amor como el sexo se han banalizado mucho en nuestra sociedad llamada "desarrollada". Cada día pierde más su esencia y su belleza.
Gran tema, como siempre, Enrique!!!
Un enorme abrazo, querido amigo!!!
Gracias, Emilio, siempre tan amable. No podría estar más de acuerdo contigo y es por ello que no añadiré nada o casi nada, sólo añadiré, si acaso, la genialidad del Creador que para que la especie (todas las especies), gestar la procreación fuera en un acto que diera un enorme placer.
EliminarUn abrazo, querido poeta.