miércoles, 5 de febrero de 2020

Siempre le quise

Publicado el  por 



05 febrero 2020

“El sentía dolores de modo inconstante pero incesante; el mal le estaba consumiendo por dentro atacando sus más profundas entrañas; su ánimo era escaso y su mal humor insoportable. Ella pagaba y pagó hasta el final todo sus males y soportó su estado, con sus desprecios, sus malos tratos y su insufrible coexistencia.”

Me encontré  a Lucía en el camino al Faro. Iba elegantemente vestida, figura esbelta y un porte de señora bien que hacía que todos sintieran un extraño vértigo a su paso. Era la guapa mujer que fue y que seguía siendo a sus sesenta y muchos … una atractiva y bella señora. Me acordé, justo al verla, de aquello que ella mismo me contó cuando él murió. Pero ahora, diez años después, parecía una nueva mujer … sus ojos volvían a brillar y sus ademanes eran suaves, elegantes y receptivos como nunca o como siempre fue cuando la conocimos. Hablaba con soltura, con pausas, con una elegancia propia de las grandes estrellas del cine y así fue durante un buen rato  … luego su gesto y su ánimo se derrumbó cuando hablamos de él.  

“Le sigo queriendo, Enrique, nunca me dolieron sus desprecios, ni su maltrato,  él fue el único amor de mi vida, yo le quería, le quise y le quiero como él lo hizo mientras el mal no se apoderó de él  … ”  – y ella no pudo más, entre sollozos se abalanzó contra mi y me abrazó  … y lloró  … y lloró mientras quiso hacerlo … yo dejé que así fuera y pensé en su dolor … y en la belleza del momento y me dejé llevar por el viento del tiempo … y por su adorable y admirable, dolor.


No hay comentarios:

Publicar un comentario