Siria. Abdel Hameed Alyousef, de 29 años, sostiene los cuerpos de sus bebés gemelos, que murieron durante un presunto ataque con armas químicas, en Khan Sheikhoun, en la provincia norteña de Idlib, Siria, el 4 de abril de 2017. (STR/AP)
27 abril 2024
- Leía con cierto estupor un recorte de prensa de hace un par de años que decía algo así:
"Los tabúes legales y morales se hicieron pedazos durante la guerra civil en Siria por el uso de armas químicas. Cientos de personas murieron en ataques con gas venenoso que se atribuyeron ampliamente a las fuerzas del presidente Bashar Assad, al amparo de su principal aliado, el presidente ruso Vladimir Putin. Varios años después, crece la preocupación de que esas armas puedan ser utilizadas también en Ucrania, donde las fuerzas rusas han estado librando una guerra devastadora. (AP Noticias - Miércoles, 13 de abril de 2022 13:08 EDT)
- Dos años después seguimos con la misma preocupación, lo cual no hace más que confirmar que la estupidez humana no tiene límite, para ello no me canso de repetir que somos la única especie que tiende a la autodestrucción.
- Viendo la fotografía del encabezamiento, que he querido volver a dejar aquí para que no se nos olvide el horror de las consecuencias de las guerras, diré que no hay palabras para calificar la gesta que fue de ese periodista anónimo, todo un ejemplo para el mundo occidental, el cual sólo conoce de la desgracia de una parte importante del otro mundo mientras toma un Kit-Kat frente al televisor, como si eso pasara en un mundo lejano.
Ucrania
- Recordaré aquí una frase de uno de los más grandes y malditos personajes de la historia reciente de la humanidad que dice mucho sobre como analizan las guerras los que las comienzan, favorecen o incitan:
Si ganas la guerra, no necesitas dar explicaciones. Si pierdes, no deberías estar allí para explicarlo. (Adolf Hitler)
La ambición de unos pocos diezma la población y extiende el terror innombrable.
ResponderEliminarLa especie humana no es inteligente, es omnívora, se traga todo lo que la rodea sin ningún tipo de piedad.
Desapareció la ética.
Un beso.
Desapareció la ética para todo ... así es, Ilduara, la humanidad merece lo que tiene.
EliminarTampoco la ignominia... Cuántas muertes más van a ser necesarias para que nos demos cuenta que ya murieron demasiados, canta Dylan desde los 60's. Ominosa realidad.
ResponderEliminarAbrazazo Enrique hasta allá.
(Por alguna razón Blogger sigue mandando comentarios a la casilla correspondiente)
No tienen sentido alguno, bahorrina cruel.
EliminarNo entiendo lo que quieres decir con "casilla correspondiente".
La humanidad tiene unas heridas por las que no deja de sangrar. Son los frutos de unas semillas que no dejan de sembrarse en las nuevas generaciones: competitividad, egoísmo, consumismo, fanatismo, seguidismo, manipulación, intolerancia, envidia, rencor, odio...
ResponderEliminarLa violencia es la consecuencia lógica de todo ello. La injusticia, la arbitrariedad... Un mundo donde no hay lugar donde refugiarse, democracias frágiles en extremo (como la muestra) e indefensión.
Visto lo visto, querido Enrique, yo no veo un mundo de buenos y malos, sino de malos y más malos. Un mundo donde no los principios universales solo se soportan en un papel que, en la realidad, no se tiene cuenta, y que se utiliza para justificar todo típo de barbaridades.
Es triste que la humanidad tenga tan mala memoria, y haya tanta desidia en aprender las lecciones de la historia.
Me.entristece...
Un enorme abrazo, querido amigo!!!
Tienes razón, querido Emilio, pero fíjate que el único remedio es "resetear" y volver a empezar para recuperar los valores perdidos.
EliminarSoy pesimista, pero cada día que pasa me siento menos habitante de este mundo, querido amigo.
Estoy de acuerdo contigo totalmente. Y también soy pesimista... Y tambien siento que este mundo humano no es el mío... Y reconozco que el día que me toque marchar podré hacerlo con la pena de separarme de muchas cosas y personas bellas, pero no de abandonar la humanidad, siempre ta inhumana.
EliminarY si sentiré pena al separarme será porque aún hay algo que se puede disfrutar, compañero del alma!!!
Intentaré cargar mis emociones con tus bellas palabras, querido amigo Emilio
EliminarEsta foto también la publiqué en 2017, el Día del Niño, con un 'link' de 'El País'
ResponderEliminarHay seis fotos que son difíciles de ver...
En todo el mundo es una barbaridad... Deduele el corazón.
Buen fin de semana. Un abrazo, estimado Amigo.
Puedes ver...
Esta foto también la publiqué en 2017, el Día del Niño, con un 'link' de 'El País'
Hay seis fotos que son difíciles de ver...
En todo el mundo es una barbaridad... Deduele el corazón.
Buen fin de semana. Un abrazo, estimado Amigo.
Puedes ver...
https://avivenciaravida.blogspot.com/2017/06/dia-internacional-da-crianca.html
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He leído tu publicación y la de los artículos a los que enlazas debajo de cada fotografía. Una magnífica visión de la crueldad de las guerras. Magnífico trabajo, Majo.
EliminarGracias.
Los humanos somo autodestructivos. Te mando un beso.
ResponderEliminarMáquinas de matar, Judit.
EliminarEl fantasma de las guerras nos persigue y algunos parecen no darse cuenta, insisten en el salvajismo y la destrucción, una imagen terrible, Enrique, un abrazo!
ResponderEliminarCreo que lo ha escrito Ilduara, el hombre es omnívoro, destroza todo, María Cristina.
EliminarCuidémonos, el futuro, hoy por hoy, pinta bastos.
Sin palabras ante tanta barbarie Enrique. Y muy cierto que somos una especie destructiva que el ansia de poder lo supera todo. Ojalá las terribles imágenes que se repiten, hicieran reflexionar a todos estos barbaros.
ResponderEliminarBuena semana.
Un abrazo.
Creo que el mundo será así mientras exista el hombre sobre la Tierra.
EliminarAbriguémonos bien, Laura, suenan tambores de guerra por todo el mundo.