- Desafiar tu estabilidad
- Tragar saliva al verte en un sendero sin salida
- Notar que el sol se esconde sin saber si lo hace por no querer verte o porque alguien le ha dicho que tu sol terminó
- Pensar que has sido muy atrevido y que volver será casi un imposible
- Da igual lo que pienses o que todo está en tu contra, sigues marchando por ese sendero sin final, sin importarte donde, ni como, acaba
- Estás rabioso, rabiando, porque ayer Julia, la inseparable amiga de Leonor, se "quedó" en un quirófano a la que la llevó el mal de males que se estableció en su útero desde a saber cuándo y a saber por qué oscura mal interpretada decencia ya que (Julia) nunca se dejó visitar por médico alguno que lo hubiera podido descubrir y tratar a tiempo
- Andas y te dejas llevar por ese camino por el que te has metido hoy desafiando a tu discapacidad y a tu alma … rabioso, sí, en este caso por la soberbia de la ignorancia sobre lo que viene y por esa falsa dignidad cultural que nos implantaron al nacer y que tanto mal ha hecho y sigue haciendo, entre mis colegas del antiguo Bachiller de los 50
- Ni tanto, ni tan poco (de tu estado)
- A mí me hubiera gustado nacer en el 2050 (tecnología)
- Aunque no renuncie a haberlo hecho en el 49 (costumbres, tradición, familia)
- Sería como una doble vida, a eso me refiero. Adiós Julia, sentimiento Leonor
- Mi rabia es solo una forma de mostrar mi sentir
- Quejarme no debo, pues puedo hacer camino ... y sigo
- Escucharé al mar, extenderé mis utópicas alas y regresaré a mi homérica Ítaca
- Donde se pueda ser feliz, allí es
Hay eventos humanos que nos provocan la mayor de las iras, así los diseccionemos desde diferentes costados. Nos duelen porque se pudieron evitar, y divagamos especulamos sobre ellos. Si nada se pudo hacer, bien como lo dices hay que regresar a la Ítaca personal, y vivir el pedazo de felicidad que nos toca. Un abrazo. Enrique.
ResponderEliminarGracias, Carlos, así es.
EliminarEl esfuerzo requiere recompensa aunque sea interna.
Épica entrada, amigo Enrique!!! Y sin seguirte fielmente, me surgen preguntas...
ResponderEliminarSerá que todas las Itacas terminan estando en un@ mism@?
Será un viaje de (re)descubrimiento de un@ mism@?
Será que las grandes incógnitas de la vida se refieren a un@ mism@?
Y por qué no plantearlo como posibilidad? Será que el mundo más allá de un@ mism@ solo es un reflejo de ser esencial que somos?
Y dejo de filosofar, aunque mi instinto deja demasiadas preguntas incontestables a mi mente...
Un enorme abrazo, querido amigo!!!
Leo con atención tu comentario y no podría estar más de acuerdo contigo, Emilio. Mi Ítaca vive en mí, quizás sea yo mismo, siempre con Ella.
EliminarUn abrazo fuerte, muy fuerte.
Ayyyyyy mi querido Enrique , en mi llegada encuentro este post triste , pero que tambien es VIDA, porque la vida tiene estas cuestiones, las que comprendemos y las que no, las que escapan al entendimiento...y nos quedamos haciendonos preguntas (muchas) que en realidad no tienen respuestas certeras . Coincido bastante con el pensamiento filosofico de Emilio.............,., aunque creo que todos tenemos un destino , una hora y minuto final sobre el cual nada ni nadie puede incidir. Saliendo de esta tristeza que has tenido que transitar, te digo que de mi parte me alegro y mucho de saberte muy bien!!!!! ( yo tambien lo estoy!!!) . Besossssss y bello dia... y a seguir con esa porcion de felicidad que todos los dias de una u otra manera toca nuestra puerta.
ResponderEliminarSiento una enorme alegría por volver a sentirte, querida Eli, me alegra saber que estás bien y de mí, ya sabes, algún día me toca auto reñirme pues la felicidad tropieza en el camino con alguna piedra que de modo irremediable aparece en él de modo innegociable. Recordaré aquella frase del maestro en el que decía que "últimamente no sé qué pasa, pero gente a mi alrededor que antes no solía morirse, ahora empiezan a hacerlo". Ese fue mi único mal de ayer que, además, se vio incrementado por mi atrevimiento a alejarme del coche con solo la muleta como fiel acompañante, cuando ya necesito las dos.
EliminarUn abrazo muy fuerte y, sí, voy a prometerte no ponerme triste nunca más.
Un abrazo muy, muy, fuerte, querida Eli.
otro enorme que va de vuelta!!!!!! He cerrado provisoriamente los comentarios porque las musas no me abandonan jajajaj pero visitar a todos los que quiero y a los que debo atenciones y visitas me resta tiempos que no tengo, por eso aunque sea unos dias andaré asi...de visitas jajajajja devolviendo un poco de ese amor que recibo de tanta gente linda.. y por lo demás...la tristeza es parte de la vida... sentirnos tristes tambien nos permite apreciar con mas intensidad lo bonito que nos rodea. Te cuidas....con una muleta o dos...jajajaj
EliminarLo haré, querida Eli y por la falta de tiempo no debes preocuparte, leerte ya es un placer inmenso, y por otra parte a todos nos pasa lo mismo, hay tiempos en que no podemos encontrar esos momentos para atender el mundo lector y escritor que tanto nos gusta y como lo sabemos, lo comprendemos.
EliminarUn abrazo fuerte y no dejes de escribir nunca... mientras puedas.
Uy que pena con tu amiga. A veces uno accede a los avances médicos por miedo y a veces por falta de dinero. Te mando un beso y hay que seguir luchado.
ResponderEliminarAsí es, amiga Judit, o por pudor mal entendido pues a nadie y, especialmente, cuando ya tienes algunos años, le gusta andar en médicos en los que se pierde la intimidad.
EliminarUn abrazo, escritora.
Lamento lo de esa mujer.
ResponderEliminarQué triste es saber que podría haberse evitado.
Quizás retrasado, pero ya ves, hay estigmas de los que aún no podemos desligarnos. Una pena.
EliminarFeliz lunes, TS.
Coraje es lo que se necesita para vivir, coraje para no romperlo todo a patadas, coraje es lo que demuestras, coraje es esperanza...
ResponderEliminarAbrazo agradecido hasta allá inspirador, amigo.
Gracias, amigo Carlos, no queda otra o seguir o echarse a un lado.
EliminarUn abrazo muy fuerte, mi pensador y poeta amigo.