jueves, 21 de julio de 2022

Pepe, la Loli, Antoine y el Ateneo siguen radiantes y necesarios

Fotografía de Robert Doisneau

 21 julio 2022


- Mi estabilidad no es la de un buscador de leones, precisamente, pero ayer decidí salir con rumbo al Ateneo de mis amores … y lo hice … y no tuve que arrepentirme.

- Pepe, el sindicalista retirado pero ejerciente de lo que sea siempre que toque organizar y dirigir algo que suene a social, me dio un abrazo que casi me tumba de no ser porque mi tercera pierna de aluminio, me mantuvo en pie 
  • Tío,  si no vienes tú aquí no hay fotos, ni tertulia, ni tablet con el que buscar fotos de tías en bolas” 
  • Pepe, me adora.

- Antoine, apenas me vio, se saltó todas las normas y me apartó de todos para sentarme con él en la mesa que hay junto a los lavabos. “Enrique, vuelvo a tener el dilema de siempre: Amo a Matilde, pero la pasión sexual verdadera y las apreturas  las manejo con la Loli  ¿Podrías cubrirme esta noche y decirle a Mati que estamos pescando, mon ami?” 

- La Loli, la barista más bella y atrevida de toda la Playa, nos estaba mirando como si no quisiera hacerlo, como esperando una señal … y yo le dije a Antoine lo que no quería oír aunque le sirvió … “Cuéntale que sí y luego si se complica le dices que me fui porque me dio un infarto o algo así, que para una mujer enamorada siempre es creíble todo o casi todo … “ 

- Vi como Antoine le guiñaba un ojo a la Loli y ésta, sin más, se acercó y me dio dos besazos en el morro de los que tardaré tiempo en olvidar.

- El resto y para no convertir esta página en un “ladrillo”, diré que se limitaron a contarme, uno a uno, todos sus problemas, historias, cuentos, verdades, mentiras y hasta creyeron que lo creía, como siempre. Lo que no saben es que ellos son fuente de vida conmigo o sin mí, son buena gente, gente sencilla, refugiada en su soledad y en la de los demás, en sus partidas de dominó, en sus charlas, sus carajillos, sus discursos y en su generosa capacidad para inventar situaciones, historias y hasta alguna verdad. Son mis héroes de siempre, esa gente olvidada que nadie sabe apreciar que aún tienen vida … y mucha.



14 comentarios:

  1. Me haces ir entre dos emociones. En unos momentos me haces reír y en otros me emocionas por la autenticidad de la vida, y de las vidas, que relatas.

    Te das cuenta de que eres un cronista??? Retratado el mundo. No sé cómo lo hacías con la fotografia, pero con la palabra lo bordas, porque ves más allá de lo aparente y te detienes en la sencilla y buena sensibilidad de las personas. Pasiones mundanas, sí. Pero pasiones humanas, auténticas, sinceras, reflejo de la humanidad de sus protagonistas.

    Y además lo haces genial, Enrique. Prosa de la buena!!!

    Un enorme abrazo, querido amigo!!!

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    1. Gracias, Emilio, has conseguido ponerme colorado.
      Solo hago fotografías con las palabras que salen de mi realidad diaria, quizás manipulada, quizás adecentada, quizás tan real que conviene darle un dulce tono cómico para evitar la ruptura entre la dura realidad y el deseo de dictar el guion de cómo interpretar si así debieran ser las cosas que a veces me hieren y otras em enamoran.
      Un abrazo, Emilio, gracias, me hace falta ese apoyo que me brindas siempre.

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    2. Una vez cogida la materia prima, que es la realidad, haz lo que creas más conveniente con tu alma de cronista y literato. Lo importante es que disfrutemos, y tengo que reconocer que poco me importa cuánto te alejes de la realidad observada mientras reflejen tus pensamientos, emociones y unas experiencias creíbles

      Y a de mis que hasta ahora lo has conseguido. Y disfrutando de ello. A veces como un enano!!! Que, por cierto, no sé de dónde viene esta expresión, un tanto ofensiva. Habrá que dejarla de utilizar.

      Abrazos, amigo!!!

      No pares ni en vacaciones!!!

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    3. No puedo parar, tengo muchas "obligaciones" y no me lo puedo permitir. Me pedí todo el mes de vacaciones, uno más, jajajaja. Bueno, bromas aparte, al no tener mucha movilidad me es mucho más fácil y necesario conectarme por aquí con mis sentimientos, mis recuerdos, mis nietos, mis hermanos (todos algo lejanos en cientos de KM) y hasta con mis amigos, otrora compañeros y que ahora andan dispersos por toda la geografía nacional.
      Un abrazo, Emilio.

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  2. Se ve que esto del Ateneo es vivificante... Genera alegría, historias, amores, vivencias y, levanta alguna falda para lucir "enseña"... (Enseña: Bandera que representa a un colectivo de personas.) No necesariamente en su acepción de "enseñar". :))))))

    También cuenta en ello la colección de personajes que lo compone. Empezando por el maestro de ceremonias, Enrique. Su buen hacer y diplomacia. Su disposición natural y aguante. Su imaginación sin límites... ¡Su fuerza de vida!

    Sigue por esta senda amigo. Ganamos todos.

    Fuerte abrazo Enrique.

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    1. Gracias, Ernesto, tú, Emilio y todos los que pasáis por aquí, hacéis que me siga gustando estar ... y escribir.
      La vida, la rutina diaria, no lo es si la dispones en la mejor forma que conviene a quien la escribe y describe.
      Un abrazo fuerte, ERnesto.

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  3. Gente olvidada que nadie sabe apreciar. Me parece que te refuieres a las trabajadoras deun cabaret. Lo único es que no entiendo mucho el contexto. No obstante, y para no quedar mal contigo, te voy a pasar algo que tiene que ver con ese mundo de los bares y que sé que te gustará.
    https://tigrero-literario.blogspot.com/2014/09/agustin-lara-y-su-maria-bonita.html

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    1. El Ateneo es un viejo bar, bueno, decorado al viejo estilo de los bares de los 50, donde nos reunimos varios y viejos veteranos de la vida social y no tanto, para contarnos nuestras cosas a diario, tomamos café o lo que convenga y toda la gente que por allí va es gente que se lleva su periódico, toma su cafe y mantiene una entretenida charla con todos los que allí acuden a diario y desde siempre. El Ateneo ejerce el papel de lo que pudiera ser un club social y por tanto, muy lejos de lo que se denomina o sería un cabaret.
      Me voy a leer tu artículo, Alí. Un abrazo.

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  4. Lo que daría por fisgonear de cerca esas tertulias, personajes vivificantes, sus jergas, seres poéticos en total estado de naturalidad... Insisto: habría que poner cámaras allí, cuando ya las gentes están, y tan sólo dejarlas andar... Extrañaba estas instantáneas o aguafuertes como aquí Robert Arlt solía llamar...
    Las fotos de Doisneau siempre cierran el círculo, amigo.

    Eres un gran cronista, Enrique. Abrazazo hasta allá para La Loli, Pepe, Antoine y los demás...

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    1. Es fácil querido amigo Carlos P., cierra los ojos, extiende la mano, te coges de la mía y nos vamos para el más bello lugar que hayas visto jamás: El Ateneo.
      Un abrazo muy fuerte poeta amable y amigo.

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  5. Tu texto, y ese sentimiento por seres, al parecer soslayados, esos que tienen decir porque viven, me llevan a mis amigos de bar, de lecturas, de un café mientras molemos la añoranza de cuando queríamos cambiar el mundo. Un abrazo. Carlos

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    1. Me siento contigo en esa mesa virtual, Carlos A. Gracias, así es.
      Un abrazo.

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  6. Es bueno contar con amigos y sentirte a gusto. Te mando un beso.

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