miércoles, 2 de junio de 2021

Ese don perdido: La sencillez


Fotografía de etf - La alberca  (Murcia)

02 junio 2021

"Mire usted, yo adoraba a mi padre  ..  él si sabía lo que era trabajar ... de sol a sol, sin descanso, sin poderse poner enfermo, sin que nadie pudiera ayudarle, pues todos tenían lo suyo; nunca nos faltó de nada; la guerra no pudo con él, ni los militares tampoco ... pero una mala gripe se lo llevó en el 83. Me dio estudios, fui maestra aquí en el pueblo, y me jubilé con honores ... me dieron una placa. Mis hermanos se quedaron con la tierra porque así lo quiso mi padre, pero ellos la vendieron para hacer casas. Yo no quise ni una peseta ... nunca les perdoné que las vendieran, nunca trabajaron se lo gastaron en el juego y en vicios, fue como una maldición  ... uno murió de un infarto en el 90 y el otro se fue a Madrid y nunca más he sabido de él. Mire, haga fotos ahí arriba también,  hay mucho que arreglar ahí,  cualquier día se va caer algún viejo desde ahí al barranco. Dígale al Alcalde que ha estado usted con Faustina, la del Grillo,  que le he votado" ...

Y Faustina, a la que nunca jamás había visto, se marchó dejando tras de ella ese halo que solo el tiempo regala a esas personas de alma noble,  y se fue repartiendo "buenos días" y "vaya usted con Dios" a todo aquel que se cruzaba en su camino,  dejando ese rancio y agradable sabor en el alma, ese sabor a esa cosa que algún día estuvo en nosotros y que, inexplicablemente,  hemos perdido ... la nobleza y la sencillez del pueblo llano.


14 comentarios:

  1. ¿Qué hay ahora allí donde supuestamente debiéramos tener el alma o la conciencia o como se llame ese apéndice de la sensibilidad que en la gran mayoría hoy parece ausente? suelo también preguntarme... hasta que escenas o historias como la tuya me demuestran que no todo está perdido puesto que todavía hay gentes anónimas donde eso aún persiste...

    Abrazo grande.

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    1. Es cierto, Carlos P., da gusto que esa gente aún existe y que, quizás, aún tengamos remedio. El problema es que esos personajes no han dejado huella en la semilla humana que ya se manifiesta, que se empapa en alcohol los fines de semana, que ya gobierna y/o que solo quiere saber de poder, fama y dinero fácil.
      En fin, Carlos, seamos optimistas, igual el mundo, como las tortillas, da la vuelta en el momento oportuno para no quemarse.
      Un abrazo de jueves.

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  2. Basta un buen relato, para de manera aleccionante dejar impresa en la palabra, la virtud de la sencillez. Un abrazo. Carlos

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    1. Así es Carlos A. Bien contado, sencillamente.
      Un abrazo.

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  3. Una historia real que nos viene muy bien para refrescar esas cosillas que de a poco se nos van perdiendo..Me gusta pensar que hay muchaaaaaaa gente humilde , sencilla , de buen corazon...tambien soy consciente que no abunda...pero las hay...
    Insisto en que la educacion de los chicos tiene mucho que ver, aunque hoy se tienen que enfrentar a cuestiones que ponen en juego todo el tiempo justamente este don.Mi abrazo grande hombre humilde.

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    1. Gracias, amiga Eli, la vida nos va descubriendo como somos, poco a poco, momento a momento, ya sabes, la experiencia nos hace sabios de un modo inversamente proporcional al tiempo de vida que nos queda para disfrutarla.Feliz jueves.

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  4. Genial relato la gente cambian cuando hay dinero por medio. En la vida hay que ser sencillo, generoso y grato. Te mando un beso

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    1. Un buen deseo y una gran definición, JP. " sencillo, generoso y grato" ese debiera ser el objetivo de cualquier persona.
      Feliz jueves

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  5. El vil metal cambia aunque las personas no quieran .., el cambio des estatus ya es de por si un cambio . Un buen texto.

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    1. Gracias Campirela, un placer verte por aquí. Al fondo hay una mesa libre.
      Un abrazo

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  6. Hola, Enrique!

    Preciosa descrição de Faustina, una mujer sensível y grata.

    Abrazo.

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    1. Hola Ceu, como Faustina, seguramente, habrá mucha gente, sí, quizás el problema que tenemos hoy en nuestro mundo, es que a este tipo de personas, igual que nos pasa con la belleza, no sabemos verlas.
      Un abrazo.

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  7. Es cierto amigo, se a perdido esa sencillez de pueblo. Muy reflexivo texto Enrique. Saludos a la distancia.

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