Louis Obert Gold. (1910)
27 julio 2022
- Salí al mundo y miré a mi alrededor y estaba solo, desnudo. Había mucha gente, mucho bullicio, todos gritaban a su manera para hacerse entender, todos querían ser los primeros, algunos incluso chillaban mas que otros para ser oídos, como si de esa manera se pudiera tener más razón o más derecho, todos se agolpaban alrededor del manantial del poder, todos querían lo mismo, todos estaban como yo, solos, muy solos, solo que yo estaba en un ideario distinto y lejano … siempre desnudo.
- Fui creciendo y a la vez observando como el amparo del poder va desapareciendo de forma inversamente proporcional al éxito sin seguir las normas, es decir, tus ideales sobre la fidelidad, el necesario entusiasmo profesional, el ingenio, la capacidad de decisión y tus buenas maneras para crear tu equipo, te llevan a él (al éxito) despreciando métodos de sometimiento al búnker del poder, lo cual tiene un alto riesgo pues si tropiezas te mandan al purgatorio.
- Peligra tu futuro profesional si no eres capaz de administrar tus propias ideas en contra de los deseos del búnker. Ceñirse a las exigencias del poder tiene sus riesgos. El poder es “insaciable”, pero el poder no es Dios y tarde o temprano algún resentido, o al que del pastel le tocó la peor parte o ninguna, acaba vendiendo su alma al Fiscal de las Tinieblas de parte y eso, sin duda, será su peor castigo, el de la indignidad y el del repudio de una sociedad que se debate entre el tener poder y/o el ser persona. De la caída del búnker del poder y su arrastre solo te salvas si tu éxito existe, aunque sea o no sea extraordinariamente brillante, pero que sea éxito, los nuevos titulares del nuevo poder te tendrán en cuenta.
- ¿Y qué es el éxito profesional?... la cuenta de resultados.
- Desnudo, siempre desnudo, trasparente, pero con una buena cuenta de resultados te conviertes en un chico brillante, repugnante porque no "connives" con ningún poder político o mediático, pero el poder te soporta, aunque, eso sí, dejan de compartir sus métodos contigo por si te vas de la lengua. Te conviertes en un bicho raro. No te haces rico pero te permite vivir digna y honradamente hasta el día de tu muerte.
- Me preguntaba anoche (maliciosamente) un viejo compañero sobre qué opinaba sobre la política y los políticos de mi pueblo en la actualidad. Le contesté lo que siempre le dije: "La política es el arte de saber mentir. Si mientes bien, te votan, si mientas mal, te botan", yo sigo hablando con ellos, con los viejos y con los nuevos, pero ahora me abrigo. A veces voto a unos y otras veces botan a otros.
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Esperemos -como decía Borges- algún día ya no merecer a los políticos, casta que nos mantiene de rehén con todo un sistema de engañifas y coerciones que durante siglos han montado y afiatado para que no encontremos nada superador de las supuestas funciones y obligaciones que debieran emprender y ejecutar en beneficio de los ciudadanos que deben representar...
ResponderEliminarAbrazo empático amigo Enrique hasta allá!!
Gracias, amigo Carlos P., me ha dado el ramalazo con la política en estos últimos días y reconozco que no es divertido. Gracias por aguantarme.
EliminarAgradezco tu empatía, mi amable amigo.
Un abrazo muy fuerte, siempre caluroso
Hola Enrique , pues que quieres que te digas , algunos venderían su alma al diablo con tal de estar en el poder , incluso mentir descabelladamente , y no te creas que todos los partidos son iguales , te diría como dice mi primo" Son los mismos perros de siempre pero con collares diferentes" con esto te lo digo todo , muy buena entrada , besos de flor.
ResponderEliminarTiene razón tu primo, Flor. Todos son iguales ol casi todos.
EliminarEn estos últimos días se han dictado sentencias de los jugados (después de once años) por casos de corrupción en contra de gente conocida (antes amiga) y me estoy dando cuenta de que me está afectando.
Mil besos, Flor.
Uy siempre hay que ser transparente en lo posible y tienes toda la razón de los politicos.
ResponderEliminarGracias, Judit, antes iba desnudo a verlos, ahora voy siempre con el alma y la razón con vestido largo.
EliminarUn abrazo, escritora.
El éxito y la dignidad. A veces el éxito transgrede la moral. El poder, como dice un amigo por estos lados "jode". Perdió su esencia de la buena política.
ResponderEliminarSabias palabras, Carlos A., se confunde la fama con el éxito, la felicidad con el dinero, el amor con el sexo y la dignidad con ... no hay mucha dignidad en según que espacios de la sociedad.
EliminarUn abrazo.
Políticos, en el mejor y más amplio sentido del término, sumado a la democracia, con sus inevitables vaivenes, es hoy el mejor sistema de organizar y gobernar un país... que conozco.
ResponderEliminarOtras opciones viables, hoy también, Donald Trump, Bolsonaro, VOX, extrema derecha, dictaduras, etc.
¡Al gusto!
Abrazos Enrique.
Ay, Ernesto, es lo mismo que piensa mi cura favorito sobre el matrimonio, es la menos mala de las formas de vivir en pareja.
EliminarCuriosamente los líderes que citas viven y gobiernan o han gobernado, en paises de los llamados democráticos. Mi Padre solía decir que todas las políticas son buenas, quienes las hacen malas son los hombres.
Un abrazo, amigo.
¡¡Con la iglesia hemos topado!! :))))))
ResponderEliminarTu acertado matiz de que esos perosnajes "gobiernan" o han gobernado en democracias, viene a confirmar que las democracias no son un tiesto de geranios que plantas... y alla se las compongan!
Si no hay riego, cuidados, implicación personal, mantenimiento, corrección si fuese necesario, etc., esa "democracia" corre el riesgo de naufragar, diluirse, o convertirse en cualquier otra forma de dirigismo político.
Y para muestra, querido amigo, me reafirmo en los personajes señalados!
Gran abrazo Enrique.
PD: Dicho lo cual, no en vano "fuí cocinero antes que fraile", en relación a mis conocimientos y opiniones en el pasado sobre la política, que viví con intensidad de un ciudadano más, hoy no participo en absoluto. No votamos desde hace más de 20/25 años.
Le reconozco el valor que tiene, su relevancia, pero dejo que el río de la vida fluya...
Sabio comentario, amigo Ernesto. Yo, por muy desengañado que estoy de la política que hacen los políticos, sigo votando (a unos y a otros) y lo hago recordando mi presencia activa en mis años estudiantiles con el SLEUB (sindicato libre de estudiantes de la Universidad de Barcelona, a finales de los sesenta), donde sufrí algún desengaño y no continué mi vida política. Decidí dedicarme a estudiar, jugar al fútbol (Damm y juveniles del RCD Espanyol de Barcelona) y a tener novia, además, mi Padre me puso a trabajar cuando cumplí los diecisiete, o sea, llevaba, como todos los de nuestra generación, una vida tremendamente ocupada. Termino para no aburrirte: decepción con los políticos (que no con la política), sí, pero sigo votando, tengo la impresión de que es la única manera que puedo decirle algo a quien me quiera gobernar.
EliminarLa política y en democracia, debiera ser, honrada, participativa y sincera. Dejé de creer en los políticos cuando Murió Tierno y después Anguita. Ahora, ya sabes, solo me queda votar.
Un abrazo, Ernesto.
Has despertado a la bestia, Enrique!!! Un tema muy duro, muy ingrato, muy angustioso... Pero creo que haces bien en poner el dedo en la herida.
ResponderEliminarYo me voy a las esencias directamente...
Existió un momento de la historia en la que pensadores avanzados hablaron de un capitalismo humano, de la misma manera que en su día hubo un socialismo utópico. Todo eso es quedó encerrado en el vientre de la historia como una herencia del humanismo de la Ilustración.
El mundo actual es, sobre todo, el imperio de la propiedad y del poder. No hay buenos y malos, solo malos y más malos. Y aunque vivamos en una democracia, el poder sigue siendo una tiranía, más o menos ilustrada, y más o menos social.
Veo mucha oscuridad en el futuro, pero tal vez el mundo que predijo Aldous Huxley no sea tan malo para las generaciones futuras...
Bien explicado y razonado, Emilio. Al hilo de lo que expones e intentado buscar algo de positivismo a la situación actual, diré lo que contaba Ignatius Reilly en "la Conjura de los necios" y, desde luego no para todos los jóvenes de hoy, solo para algunos de ellos, los que más se ven: "Por el bien de las generaciones futuras, esperemos que sean estériles".
EliminarUn abrazo muy fuerte, Emilio. Encantado de verte por aquí.
Jajajajaja
EliminarReconozco que me has sorprendido. En absoluto lo esperaba!!! Y se me ha escapado una sonora carcajada.
Pero suscribo la frase de Reilly si las nuevas generaciones no despiertan del sueño eterno en el que muchos están sumidos.
Enorme abrazo, querido amigo!!!
Tú me sorprendes a mí, Emilio. Feliz tarde
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